La vida, es como una caja de colores.La mayoría de
las personas, son cajas de ocho, pero lo que buscamos
son cajas de sesenta y cuatro. Me imagino a mi mismo,
como una de esas, aunque me faltan algunos. Pero eso
está bien, porque tengo algunos colores más vibrantes,
como el vigor o mi disposición.
Pero también tengo otros problemas, que sólo pueden
solucionarse con los ocho colores de las otras cajas.
¿Alguien más tiene este problema?. Quiero decir que
hay tantos colores en la vida, para sentir, articular…
De manera, que cuando me encuentro con alguien que
es un paquete de ocho digo:»Anda, ¡hola magenta!.
Y ella responde:» ¿Quieres decir moradp?»y se va con
su morado, y a mi eso me gusta, porque no quiero
magenta.