La mujer incluso se personaba en los juzgados representando a los clientes, sin poder defenderlos
La Policía Nacional, en el marco de una investigación destinada al esclarecimiento de una estafa e intrusismo profesional, ha identificado y detenido en el municipio malagueño de Fuengirola a una mujer que se hacía pasar por abogada y que cobraba a sus clientes minutas por más de 2.000 euros.
Los clientes perdían sus demandas a causa de indefensión, dejando de percibir además las cantidades demandadas, que en algunos casos llegaban a los 80.000 euros, según han informado desde la Policía Nacional en un comunicado.
Según las pesquisas, la falsa abogada llegaba incluso a personarse en los juzgados con sus clientes, donde era descubierta por los agentes judiciales, provocando que los supuestos representados quedasen indefensos y motivando, además, los archivos judiciales de las denuncias. Esto, en algunos casos, hizo perder a los clientes importantes cantidades económicas sobre sus demandas.