Manuel Montoya, padre de Bernardo Montoya, que ha confesado en dependencias de la Guardia Civil de Huelva que es el autor de la muerte de Laura Luelmo, ha reiterado este miércoles su perdón a la familia de la joven y ha remarcado que «ellos no tienen culpa» de los hechos cometidos por Bernardo, por lo que ha pedido a los vecinos de Cortegana (Huelva), donde reside el resto de la familia Montoya, que «nos perdone, que no tenemos culpa».
Manuel Montoya, en declaraciones a Telecinco recogidas por Europa Press, ha incidido en que si su hijo ha confesado el crimen que «cumpla» y que la justicia «le eche los años que le pertenezcan».
Cabe recordar que el autor confeso llevaba dos meses en libertad tras salir de prisión el pasado mes de octubre después de cumplir una condena de dos años y diez meses por dos robos con violencia contra mujeres ocurridos en 2015.
Previamente, cumplió otra condena de 17 años y nueve meses, en esta ocasión por el asesinato, obstrucción a la justicia y allanamiento de la vivienda de una anciana de 82 años en Cortegana.
Así, debido a su amplio historial delictivo, el padre ha asegurado que tras tantos años «estaba muy tranquilo» y pensaba que «no iba a hacerlo más», pero «si lo ha hecho que cumpla», ha apuntado.
Además, ha asegurado que ahora vivían tranquilos en Cortegana y «la gente estaba contenta», por lo que ha lamentado que ahora «no tengan esa paz» debido a los actos de Bernardo Montoya.
«Nosotros no tenemos la culpa, ni mis hijas ni yo», ha enfatizado antes de reiterar su pésame de nuevo a la familia de Luelmo. «Lo siento de corazón y espero que la calma entre en sus hogares», ha proseguido, apelando al pueblo de Cortegana que «nos perdone que no tenemos culpa», ha concluido.