La junta de gobierno local del Ayuntamiento de Málaga ha aprobado este viernes la impugnación en vía contencioso-administrativa de la ejecución de las obras del metro al Hospital Civil y solicitar que se incluya la suspensión cautelar de la ejecución de los actos administrativos.
La Consejería de Fomento y Vivienda de la Junta de Andalucía sacó a licitación pública el pasado 24 de octubre las obras de prolongación de la Línea 2 del Metro de Málaga desde Guadalmedina hasta el Hospital Civil y Materno Infantil.
Con base en los informes emitidos por técnicos municipales de las áreas de Ordenación del Territorio, Accesibilidad y Movilidad, que habían sido puestos en conocimiento del Gobierno andaluz sin que desde entonces se haya producido respuesta o rectificación alguna, la junta de gobierno local ha aprobado estas peticiones, según ha explicado el alcalde, Francisco de la Torre, este viernes en una rueda de prensa.
El Ayuntamiento da este paso tras haber aprobado –el pasado 13 de febrero en junta de gobierno local– solicitar a la Junta de Andalucía la anulación del proyecto de construcción del referido tramo de metro en superficie y habiéndose producido con posterioridad y pese a esto, la aprobación por parte de la Junta de la autorización del gasto y la celebración del contrato hasta un importe de 34.238.737,21 euros IVA excluido, ha señalado.
El regidor, que ha estado acompañado por el portavoz del equipo de gobierno, Carlos Conde, y la teniente de alcalde del Área de Movilidad, Elvira Maeso, ha explicado que «el argumento esencial» para tomar esta decisión es debido a que «la movilidad pierde capacidad» y existen problemas que se generan «en puntos concretos de intersecciones».
De la Torre ha detallado que los informes del Área de Ordenación del Territorio, en concreto de la Gerencia Municipal de Urbanismo, concluyen que la solución propuesta en el proyecto constructivo altera de manera «sustancial» el esquema de movilidad general de la zona oeste de la ciudad.
Asimismo, no considera un proyecto completo el documento aprobado por la Junta andaluza, en el sentido de lo expresado en el artículo 125 del reglamento general de la Ley de Contratos del Sector Público, al no haber contemplado las obras de urbanización necesarias para que las calles que el proyecto de la plataforma tranviaria deja en fondo de saco puedan mantener la funcionalidad y el acceso de los servicios básicos y de emergencias.
Los propios informes recuerdan que dicho proyecto constructivo incumple la normativa de accesibilidad (Decreto 293/2009, de 7 de julio), al establecer unas dimensiones de acerado que incumplen las establecidas, con carácter de mínimos, en la normativa vigente para las anchuras libres de obstáculos en los itinerarios peatonales accesibles.
Concretamente, en la calle Santa Elena «se plantean problemas de edificios que quedan sin rampas de accesibilidad, salvo que las hagan dentro del edificio y eso según lo que queda documentado es materialmente imposible», ha apuntado De la Torre.
En este sentido, un informe del Área de Accesibilidad explica que en el proyecto se identifican de manera errónea los conceptos de «anchos de acera totales» con «anchura mínima libre de obstáculos» y en algunos tramos no se ha previsto la ubicación de algunos servicios urbanos por lo que «no es posible predecir si habrá en todos los itinerarios anchura de espacio suficiente para que pueda circular un usuario en silla de ruedas».
También ha señalado el alcalde que el proyecto crearía «problemas» de tráfico, como señalan los informes municipales, con 14 puntos en situación D y dos de situación E, según una medición que clasifica en A el mejor estado de la circulación y en E, el peor.
Los informes de las áreas municipales también ponen en evidencia que la ordenación viaria resultante de disponer una plataforma tranviaria en el eje Santa Elena-Eugenio Gross-Blas de Lezo deja cinco calles transversales a León Gross en fondo de saco e «incumple», entre otras, la Normativa de Urbanización y lo dispuesto en el Código Técnico de la Edificación.
El proyecto elimina, por falta de espacio para poder ubicarlo, el carril de circulación en sentido Sur entre las calles Eduardo San Martín e Hilera, lo que en la práctica convierte las calles anteriormente mencionadas en calles sin salida, ha señalado De la Torre, apuntando que «no queda garantizado», en la configuración recogida en el proyecto en licitación, el acceso a los vehículos de emergencia.
«De hecho, el propio proyecto en sus datos reconoce que los viajeros van a ser captados el 91 por ciento de la EMT, y solo el nueve por ciento del tráfico privado. Demuestra que la utilidad para el transporte público total, digamos integral, –sumando metro más transporte en superficie– es mínimo», ha señalado el alcalde.
Asimismo, ha indicado que la reflexión que a la que han estado «animando» a la Junta sobre el proyecto «sigue abierta al nuevo gobierno que sale o saldrá, para que la reflexión que hemos incitado estos años profundice en la solución de esto».