Agentes de la Policía Nacional detuvieron el pasado miércoles a un hombre, de 38 años y nacionalidad española, por su presunta implicación en un delito de odio y otro de amenazas.
La víctima era un vigilante de seguridad de origen africano que fue recriminado mientras ejercía su trabajo en un supermercado.
Los hechos tuvieron lugar el pasado 13 de noviembre en un comercio de la capital malagueña donde la víctima trabajaba como vigilante de seguridad. Tras sorprender a una persona hurtando productos del establecimiento y cuando trataba de identificarlo, el investigado comenzó a insultarlo y amenazarlo.
El personal del supermercado avisó a la Policía Nacional mediante una llamada a la Sala del 091 que inmediatamente envió al lugar una dotación policial que a su llegada localizó a la víctima y al autor de las amenazas forcejeando, según han indicado en un comunicado. Tras las pertinentes gestiones, el agresor fue detenido como presunto responsable de los delitos de odio y de amenazas.