El Ayuntamiento de Mijas ha planteado una modificación de la ordenanza que regula este servicio para mejorar el bienestar de los animales.
«Tenemos que estar con los nuevos tiempos. Vamos a mejorar la calidad de vida de los burros que revierte, a su vez, en la seguridad y garantía del servicio y de todas las familias mijeñas que viven de este símbolo de la localidad», ha señalado Maldonado.
De igual modo, el alcalde ha destacado que «los burro taxi son uno de los mayores atractivos turísticos con los que cuenta la ciudad y tenemos que aunar ese patrimonio que tenemos con el bienestar de nuestros animales que, además, ayuda a potenciar la imagen de Mijas como el municipio amable que es con todos ellos».
Ha explicado, además, que el área de Movilidad y Transporte ya está trabajando en esta nueva ordenanza que contará con la premisa esencial del cuidado de los burros y cuyo paso principal ha sido esta mesa de trabajo.
En este sentido, Lara ha afirmado que «vamos a garantizar que el servicio se siga prestando protegiéndolos a todos. Cada una de las partes que aquí nos reunimos hoy vamos a dar nuestras aportaciones y desde el Colegio de Abogados lo pondremos en manos de los juristas expertos en derecho animal».
Entre las primeras impresiones destacan temas como el peso máximo que pueden cargar, el descanso, las horas de trabajo y la calidad de los establos.
«Queremos que se incluyan aspectos básicos como el hecho de que estén aptos para trabajar, es decir, que estén libres de dolor o heridas, que tengan una buena condición corporal y los cascos en buen estado»,ha apuntado, por su parte, Verónica Sánchez, directora de ‘El Refugio del Burrito’.
En los últimos tres años la concejalía ya ha estado trabajando en mejorar la calidad de los animales pero se hace necesaria una modificación profunda de la ordenanza teniendo en cuenta la antigüedad de la misma.
«Hay regular todas estas cuestiones esenciales y dejarlas de manifiesto en la normativa local. Somos un municipio que vive, en gran parte, de los burros y como amamos a estos animales tenemos que conjugar esta actividad económica con su bienestar», ha concluido Rodríguez.
La historia de los burro taxi se remonta a los años 60 cuando los vecinos que trabajaban en la Sierra de Mijas al terminar su jornada y volver a lomos de sus animales, los turistas que ya empezaban a florecer les pedían hacerse fotos con ellos y dar un paseo. De ahí surgió una nueva manera de ganarse la vida para muchas familias del municipio lo que hizo que con el paso de los años estos animales se convirtieran en protagonistas del turismo mijeño.