La Empresa Pública de Emergencias Sanitarias (EPES) ha indicado este viernes que «realizará una investigación más detallada» a la desarrollada hasta ahora «para analizar todas las llamadas y procedimientos llevados a cabo» en el caso de la mujer de 47 años muerta el pasado 14 de agosto tras sufrir un ictus.
La familia ha interpuesto una reclamación ante el Servicio Andaluz de Salud (SAS) porque «la ambulancia adecuada, el 061», llegó para atender a esta paciente «casi tres horas después», según los familiares.
Según continúa EPES, «el Centro Coordinador de Urgencias y Emergencias activó, a partir de la sintomatología que presentaba la paciente, la ambulancia de la Red de Transporte Urgente de Lepe para que pudiera ser valorada en el hospital».
«Tras una nueva llamada de un familiar de la paciente que reclama el servicio, se activa una segunda unidad, ya que la de Lepe estaba atendiendo otra urgencia». «Concretamente, se activa la de Villablanca (Huelva) para que efectúe el traslado», según informa la EPES.
Desde Salud agregan que «el técnico de emergencias sanitarias de esta ambulancia que acude al domicilio llama al Centro Coordinador para que la paciente pueda ser valorada antes del traslado, ante lo que se desplaza un equipo del 061».
«El facultativo que la valora, ante la estabilidad de la paciente, indica que continúe el traslado hasta el hospital de referencia, tal cual estaba previsto inicialmente», según añade EPES, que concluye puntualizando que «estos son los datos recabados del caso hasta el momento, aunque se realizará una investigación más detallada para analizar todas las llamadas y procedimientos llevados a cabo».
Cabe recordar que, desde la familia de la fallecida –concretamente, su hermana, Blanca Morales–, han explicado a Europa Press que están a la espera de recibir todos los informes médicos, ponerse en contacto con el Defensor del Paciente, así como comenzar los trámites para interponer una demanda judicial.