El número de ejecuciones hipotecarias sobre viviendas habituales se ha situado en el segundo trimestre en Andalucía en 1.535, según la estadística de ejecuciones hipotecarias publicadas este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE), lo que supone un 22,8 por ciento menos que en el mismo periodo del año pasado.
Andalucía fue la comunidad que presentó un mayor número de ejecuciones seguida de la Comunidad Valenciana (1.413) y Cataluña (1.157). País Vasco (27), Comunidad Foral de Navarra (33) y Cantabria (45) son las que presentan menores datos.
Por otro lado, las comunidades con mayor número de certificaciones por ejecuciones hipotecarias sobre el total de fincas en el segundo trimestre son Andalucía (3.012), Comunitat Valenciana (2.663) y Cataluña (2.096). Por su parte, País Vasco (63), Comunidad Foral de Navarra (74) y Cantabria (92) registran el menor número.
Datos Nacionales
A nivel nacional, el número de inscripciones de certificaciones por ejecuciones hipotecarias iniciadas en los registros de la propiedad en el segundo trimestre de 2018 es de 14.327, lo que supone un uno por ciento más que el trimestre anterior y un 3,2 por ciento más que en el mismo trimestre de 2017.
Entre las viviendas de personas físicas con ejecución hipotecaria, 1.762 son habituales en propiedad (un 38,2 por ciento menos que en el mismo trimestre de 2017) y 727 no son residencia habitual de los propietarios (un 17,7 por ciento menos).
Tomando como referencia el total de viviendas familiares existentes en España en el segundo trimestre (18.562.200), el 0,01 por ciento iniciaron una ejecución hipotecaria en ese periodo.
Las ejecuciones hipotecarias sobre viviendas concentran el 49,4 por ciento del total de ejecuciones hipotecarias en el segundo trimestre de 2018. El 12,3 por ciento del total de ejecuciones hipotecarias son viviendas habituales de personas físicas.
Por otro lado, el 22,4 por ciento de las ejecuciones hipotecarias en el segundo trimestre son sobre viviendas nuevas y el 77,6 por ciento sobre usadas. El número de ejecuciones hipotecarias sobre viviendas nuevas aumenta un 26,5 por ciento en tasa anual, mientras que el de usadas baja un 8,9 por ciento.
(Vía: Europa Press)