Hoy, precisamente hoy, he decidido, cantar a la vida,
alejar los malos momentos, y liberar el corazón de
heridas y sinsabores.
Miraré la vida, con suficiente claridad y entereza
cerrando la puerta al fantasma del ayer…
Contemplaré con alegría, cada día de sol, y esos
paisajes llenos de luz y colorido.
Volveré a disfrutar de las pequeñas cosas, como
contemplar el vuelo de un gorrión saltando de rama
en rama.
Intentaré comprender mis errores y los de los demás.
Así quiero sentirme, vivo y lleno de alegría de vivir.
De ese modo tan singular, podré sentir la dicha de
bañarme en el mar salado de mi existencia.