Han recorrido nuestro país una centena aproximadamente de refugiados sirios que residen en estos momentos en diferentes lugares de Europa.
Entre los días 12 y 16 de este mes de junio han caminado de Lérida a Barcelona y los participantes sirios compartieron sus historias de vida con quienes les han acompañado. Las rutas llegaron a nuestro país tras haber sido realizadas en varios países europeos.
Organizada por el sector social de los Jesuitas se ha puesto en marcha esta iniciativa de caminantes por la paz llamada: “Caminos de la Hospitalidad”
Recordamos que debido a la guerra civil siria que se desató desde 2011 miles de personas han huido del conflicto hacia zonas cercanas como Jordania, Turquía, Líbano y diferentes países de Europa.
A principios de 2016 la cifra de refugiados llegó a los cinco millones, lo que supone uno de los mayores movimientos de desplazados que cualquier otro conflicto en el mundo. Respecto a la población total de Siria, suponen el 25%.
En esta desesperada huida muchos civiles han perdido sus vidas, incluso los niños más pequeños, mujeres embarazadas que se han encontrado con el incumplimiento, por parte de los gobiernos europeos, del compromiso de acogida.
Esta iniciativa de las caminatas está inspirada en el conocido sacerdote jesuita Frans van der Lugt, que fué un psicoterapeuta que abandonó su país para ir a Oriente Medio en la década de los 60 y allí se unió a la Compañía de Jesús. En sus comienzos ayudaba a jóvenes con problemas mentales. En Siria vivió casi 50 años, pasando muchos de ellos en la ciudad de Homs, donde cuidaba enfermos y hambrientos. En 2014 logró reconocimiento internacional cuando colgó videos en youtube organizando caminatas por la paz y la reconciliación, instando a la comunidad internacional a ayudar a esta ciudad sitiada. Se negó a salir de ella a pesar de la situación de peligro y fué fusilado por los extremistas del frente Al-Nusra a los 75 años de edad.
Este año los peregrinos caminaron siguiendo diversos tramos del Camino Ignaciano, que recorrió Ignacio de Loyola en el año 1522. Primero en País Vasco y Navarra y después en Cataluña, atravesando Lérida, Palau d’Anglesola, Verdú, Tàrrega, Montserrat, Monistrol, Manresa y Barcelona. A esta iniciativa se suma la ciudad de Valencia, el 19 de Junio, por la playa de la Malvarrosa. En Sevilla se convoca una marcha simbólica por el Parque de María Luisa. También en Asturias y Galicia habrá marchas por la Interculturalidad.
Estas marchas se realizan antes del día 20 de Junio, el Día Mundial del Refugiado
Hay personas que se suman a las rutas o que colaboran en la donación de ayuda humanitaria, contribuyendo con su acción a un mundo más humano e igualitario, donde se reconoce que no habrá progreso si no es de todos y para todos, donde las dificultades que padecen unas personas en el planeta, aunque estén a muchos kilómetros de distancia, pueden llegar a afectarnos, en definitiva, para construir un mundo más humano, solidario y compasivo.
