Historia del cubo de Rubik
Erno Rubik no sabía lo que se traía entre manos cuando creó el primer prototipo de cubo de Rubik. Como profesor de arquitectura, tuvo la intención de fabricar un objeto con el que ayudar a sus alumnos de la Academia de Artes Aplicadas y Oficios de Budapest a entender la tridimensionalidad y ¡voilá!, el cubo de Rubik llegó para quedarse. Cuentan que Erno no fue totalmente consciente de lo que había creado hasta que no lo mezcló y no supo cómo devolverlo a su estado original.
Desde aquel primer cubo lanzado en 1974 y creado a base de bloques de madera que se sujetaban con bandas elásticas, se han vendido más de 360 millones de unidades del que se considera el rompecabezas más popular de todos los tiempos. La década de los ochenta supuso un asombroso boom para este fantástico rompecabezas tridimensional, llegando a ganar en 1980 el premio al Juego del Año.
Desde ahí en adelante, el cubo de Rubik ha pasado a ser un objeto icónico de varias generaciones, convirtiéndose en todo un referente de la cultura pop y al que se le han dedicado numerosas exposiciones en todo el planeta.
¿Por qué el cubo de Rubik es un juguete tan popular?
Quizás lo más llamativo en él es su aparente simpleza inicial, que pronto se convierte en una gran complejidad. Es un juguete basado en combinaciones matemáticas (tiene ni más ni menos que 43.252.003.274.489.856.000 posiciones distintas) pero que tiene la virtud de que cualquiera sea capaz de intuir su mecánica y objetivo nada más que el juguete cae en sus manos.
Quien empieza con el clásico cubo 3×3 y consigue terminarlo (gracias por ejemplo, a uno de los cientos de tutoriales que se pueden encontrar hoy en día en internet), difícilmente se queda ahí. El mercado se ha llenado de modelos, de marcas, de colores y de diseños imposibles que no hacen más que alimentar el hambre insaciable de una ferviente comunidad cubera.
En España han surgido varias tiendas de cubos de Rubik (como la malagueña Ludokubo) que vienen a dar respuesta a esta creciente pasión cubera. ¿Sabes lo que es un megaminx, un pyraminx o un mirror?. Son distintas formas geométricas cuya finalidad es la misma que la del cubo de Rubik, estrujarte el cerebro hasta límites insospechados y que llegues a alcanzar el deseado objetivo. Y tú, ¿eres de los que ya resolviste el 3×3?.
Te animamos a seguir explorando con otras formas, seguro que tu pasión por el cubo no ha hecho más que empezar.