Europa se conmociona sobre las industrias que explotan a los animales, cada año son más lo que denuncian o renuncian cualquier acto que implique el sufrimiento animal. Los españoles se suman a este movimiento que fuerza un cambiar de paradigma en la forma de consumo del siglo XXI
Desde espeluznantes documentales premiados y elogiados por la crítica como, “Blackfish” sobre la tortura de las orcas en parques acuáticos, al documental narrado por el actor Joaquín Phoenix “Terrícolas”, o el reciente “Cowspiracy”, o el brutal documental “Matadero” de dos años de documentación, que ha conmocionado a todo aquel a que ha podido ver el proceso sin censura y sin morbo (solo la cruel realidad) que sufre un animal de consumo humano desde que nace hasta que muerte. Toda esta información que ha llegado como un puñetazo a Europa, ha traumatizado a cientos de personas que han dicho “basta” modificando su forma de comer y vivir en general.
Ahora en España, es de inminente actualidad tras el reciente programa de “Salvados” sobre el Lobby Porcino, que está encendiendo las redes sociales. Pero es una batalla que lleva gestándose desde hace años, sumando cada vez más personas que siguen esta lucha: contra la explotación animal.
Se suman grandes influencias de la literatura y el cine que dan apoyo y voz a multitud de ONG, plataformas y asociaciones que luchan diariamente por nuevas leyes más estrictas, porque haya penas a quienes no la cumplan y, sobre todo, por el derecho del bienestar animal y parar acabar con lo que parece el peor acto en contra de la especie animal de nuestra historia.
El goteo es incesante en todas las áreas de consumo, ya Giorgio Armani dijo referente a la moda “El progreso tecnológico nos permite encontrar alternativas válidas a nuestra disposición que hacen innecesarias las prácticas crueles hacia los animales” aunque aún queda una ardua batalla en la moda, cada año se desvinculan más marcas de estas prácticas. Un 20 % de las empresas de moda están escuchando y actuando ante la repulsión hacia las peleterías y prendas de pieles. Otros documentales o videos del YouTube de la caza del zorro, por ejemplo, han puesto en compromiso a muchas marcas.
Las redes e internet se llenan de blogs sobre veganismo, recetas veganas y vegetarianas, opciones en prendas sintéticas, santuarios de animales que sobreviven gracias a donaciones, cosmética ecológica libre de sufrimiento y respetuosos con el medioambiente, y de videos mostrando terribles prácticas abriendo los ojos a aquellos que desconocían todo esto. Todo prolifera a un ritmo acelerado en esta última década, incluso son libros como “Vegetarianos con Ciencia” que ocupan el Top 100 en Tiendas Kindle. Esto solo refleja, más que nunca, un movimiento que crece día tras día.
El informe The Green Revolution, dio a conocer sus datos en el 2016 elaborado por la consultora Latern, “el 8 % por ciento de la población española opta por una alimentación sin carne, el 60 % argumentan que son por motivos éticos”.
En Alemania según Sebastián Zósch presidente del Vegetarier Bund Detushland, calcula que “cada año va aumenta un 10 % en todo el mundo este modo de vida”. Y es que 7, 8 millones de alemanes son ya vegetarianos y cerca de 900.000 veganos, esto ha traído nuevos modelos de negocios a una población que está tomando cartas en el asunto, despojándose de su tradicional gastronomía basada en la carne.
Los consumidores pueden elegir hacia donde ir
Si los eventos o espectáculos donde sufren animales dejan de tener público. Si el consumo de carne baja drásticamente y se opta por comprar alimentos y productos 100 % veganos, vegetarianos o ecológicos. Si aumentan las denuncias contra maltrato o explotación animal entre la población. Esto será, sin ninguna duda, las mejores noticias para todos los animales de nuestro planeta. Y un cambio de dirección hacia “un mundo más justo” según PACMA, Igualdad Animal y otras organizaciones que sueñan con ello.
Ya fueron los grandes genios que han dado forma al mundo que conocemos, que denunciaban esto, ya que estaban sensibilizados con el derecho animal y representaban lo que muchos activistas hacen hoy desde plataformas como Greenpeace, Faada, Adda… Grandes personajes como lo fue Leonardo da Vinci, Nikola Tesla, Albert Einstein y Thomas Edison, fueron defensores acérrimos del respeto hacia los animales y la naturaleza. Desde entonces, se sigue en la lucha.