La apatía o ausencia de interés por las actividades que desempeñamos son señaladas con frecuencia como manifestaciones de malestar. Guardan estrecha relación con la falta de motivación, tan característica de nuestra sociedad actual. La Psicóloga en Málaga Paula Castrillo Ramírez, del Gabinete de Psicología Psicólogos Málaga PsicoAbreu señala que es uno de los fenómenos con mayor presencia entre las personas que consultan en la actualidad. No sólo es una cuestión que se observa entre los más jóvenes, la desgana generalizada puede afectar a cualquier rango de edad. La dificultad radica en la ausencia de elección de actividades estimulantes. Aquellas que nos permitan conectar con la experiencia creativa y que permitan desarrollar nuestro potencial más allá de la expectativa de rendimiento. En el ámbito escolar, laboral, durante nuestro tiempo libre, contamos con múltiples oportunidades para encontrarnos con tareas significativas en este sentido.
La Psicología Positiva nos ofrece un concepto interesante, el flow, o experiencia óptima de fluir con la tarea. Esta experiencia matiza con una cualidad diferente los retos que nos encontramos. Nuestra expectativa de éxito con la tarea en cuestión influirá pero no es lo determinante. Más bien es la actitud con la que nos implicamos en ella, permitiéndonos dedicar toda nuestra atención al desafío que nos ocupa. De esta manera se produce la “experiencia óptima”. Consiste en el estado de absorción mientras dura una tarea, y de ahí que el tiempo pase sin darnos cuenta.
El flow está relacionado con la capacidad de disponer de una mente abierta a la experiencia, gusto por lo nuevo, flexibilidad mental y con la extroversión. Las personas que activan este “modo mental” suelen encontrar más retos saludables en su día a día.
Desde la investigación y formulaciones teóricas de la motivación, según reconocidos psicólogos en Málaga, se plantea una diferenciación interesante en relación a la motivación.
La motivación extrínseca consistiría en la realización de una tarea por una iniciativa que ubicamos fuera de nosotros. La petición viene desde fuera, ya sea una persona, un contexto o los requerimientos de una situación. La motivación intrínseca por el contrario, surge de la elección personal y el compromiso con una actividad o meta determinada.
La motivación extrínseca puede ser útil para comenzar una tarea, sin embargo a la hora de mantener un esfuerzo sostenido en el tiempo y poder mantener nuestro compromiso a pesar de la dificultad es importante que se ponga en marcha nuestra motivación intrínseca. En este caso estaremos en contacto con la experiencia de flow, y será más fácil transformar las dificultades en retos y crecimiento personal.