Por Guadalupe Moreno.- Existen factores que desempeñan un papel en este proceso, como la familia en la que uno se críe, la educación que reciba y la cultura y sociedad de la que se forma parte.
Como muestra esta infografía de Statista, para sorpresa de seguramente pocos, la evaluación general de la religión y la crítica o apoyo a está se encuentra en parte condicionada por la sociedad y al país de residencia de la persona.
De esto modo, el nivel de aprobación de la religión puede variar considerablemente de un Estado a otro. Así, por ejemplo, tal y como recoge una encuesta de Ipsos, mientras el 68% de los belgas o el 63% de los españoles opina que la fe ocasiona más daños que bondades, solo el 36% de los surcoreanos y el 26% de los japoneses está de acuerdo con esta afirmación.