Este móvil cuestiona directamente la forma de hacer de los grandes fabricantes como Samsung, Apple y demás.
Tiene más vida útil, lejos de la obsolescencia programada para aumentar las ventas, los trabajadores tienen buenas condiciones de trabajo y los materiales son reutilizables.
Bas van Abel es un hombre con inquietudes en campos tan dispares como fascinantes: desde pequeño ya mostraba curiosidad por las piezas y los mecanismos de los objetos que le rodeaban, su educación le propició un gran interés por la filosofía y los viajes con su familia le generaron fascinación por las diferentes culturas y la antropología.
Gracias a estas inclinaciones, a su interés por la electrónica y a su especialización en diseño interactivo, Bas a desarrollado una gran variedad de proyectos basados en el diseño abierto. Uno de estos proyectos es Fairphone, la primera firma de móviles éticos con el medio ambiente y las personas, fundada por él. Sus móviles son más sostenibles, los materiales usados no proceden de zonas de conflicto y garantizan los derechos laborales de sus trabajadores. Además, apuestan por un modelo modular que evita la obsolescencia de los terminales y permite su mejora progresiva a través de la renovación de componentes.
Antes de Fairphone, Bas dirigió el Open Design Lab de Waag Society, donde estableció el FABLab de Amsterdam, un espacio comunitario para creadores, e inició Instructables Restaurant, el primer restaurante de código abierto.