Jamás debemos perder la luz de nuestros ojos, ni el
brillo de la mirada, a pesar de ver tantas cosas que
los pueden oscurecer.
Cada día es una pequeña vida, ella es como un viaje
por mar, hay días de calma y otros de tempestad…
Nuestra vida, es demasiado corta para hacerla mezquina,
una buena forma de proceder, es saber eliminar todo
aquello que es prescindible, eso es tan cierto, como lo
es que la conciencia tiene más peso que la opinión de
los demás.
Los mejores momentos vienen solos, por lo tanto no
tiene sentido esperarlos. Cuando nos encontramos, entre
la decisión de escoger entre lágrimas y risas,nos debemos
decidir por las más hermosas. ¡Eso entiendo, que es
aplicar una buena filosofía de vida!!.