La denuncia, firmada por Ecologistas en Acción, asociaciones de vecinos y otras organizaciones, ha sido impulsada por la plataforma No más Talas. Estima que se vulnera el Plan Especial de Protección de Monte Gibralfaro, además de realizarse en épocas inadecuadas, afectar a especies protegidas y no contar con el concurso de los Bomberos.
Esta misma semana conocíamos pro las redes sociales que todos los árboles situados a los lados de los caminos de Cerrado de Calderón están señalados con espray amarillo, la señal previa a su tala. Se trata de una zona reforestada hace 50 años, y cuyos árboles señalados no están cercanos a vivienda alguna ni sufren enfermedades que aconsejen su eliminación. Es solo un paso más en la voraz política de talas que la concejalía de sostenibilidad medioambiental, a cargo de Raúl Jiménez, está llevando a cabo en toda la ciudad, como diversos colectivos ciudadanos vienen denunciando, ante el desprecio del equipo de gobierno.
Nadie, hasta el momento, ha obtenido una explicación razonable sobre estas talas, de modo que, a instancias de la plataforma ciudadana No más Talas, han sido las organizaciones Ecologistas en Acción, la Asociación de Vecinos y Vecinas de El Palo, Rebalarte, Resistencia Animal Málaga y 69 personas a título individual, quienes han presentado una denuncia ante el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil.
Las razones para semejante medida señaladas en la la denuncia y en un escrito de la Fundación Rizoma nos parecen del todo acertadas, y queremos expresar nuestro apoyo y manifestar que, como hemos hecho hasta ahora, seguiremos trabajando en la misma dirección.
Entre esas razones se destaca que vulneración del derecho de información y participación en materia de medio ambiente de manera real puesto que, en efecto, el Plan de Prevención de Incendios Forestales (excusa aducida pro el Ayuntamiento) de la ciudad de Málaga es inaccesible a la ciudadanía.
Igualmente se señala que la época del año en que se están realizando las actuaciones es la menos adecuada, porque afecta a la nidificación y reproducción de aves insectívoras. Las talas, además, dañan el hábitat del camaleón, especie protegida en toda Europa, lo que ya provocado que el vecindario vea ejemplares fuera de la masa, en las verjas de las casas que se encuentran en la misma loma donde se están talando los árboles. Por si fuera poco, como se puede leer, el astillado de residuos y su uso como mantillo en el mismo terreno en esta época, con el calor y la sequedad reinante, facilita la propagación de un incendio antes que evitarlo. Ni siquiera se ha tenido en cuenta que algunas de las franjas de 15 metros que se han realizado con la intención de aislar las casas de la zona forestal se han realizado donde no hay ninguna, en zonas al lado de las carreteras que ya son un cortafuego en sí mismas, dejando laderas desprotegidas ante las lluvias.
Desprotección del monte
Cabe recordar, siguiendo a la Fundación Rizoma, que el Plan Especial de Protección del Monte Gibralfaro tiene como premisas la mejora de la biodiversidad, cuando los criterios seguidos son de «ingeniaría constructora “pura y dura”». Esto va en contra varias normas , como la Carta Verde de Málaga y recomendaciones europeas sobre infraestructuras verdes, además de vulnerar los proyectos, también europeas EEDUSI y Regreeneration, promovidos actualmente por el Ayuntamiento.
En definitiva, «se ha alterado completamente el sentido del proyecto» que desarrolla el Plan Especial. De hecho, varias vecinas han presentado hoy mismo una denuncia en el Juzgado de guardia contra el propio Ayuntamiento.
Desde Málaga Ahora denuncian que toda la responsabilidad de estas talas, incorrectas desde cualquier punto excepto del especulativo y urbanístico, corresponde a Raúl Jiménez, sin duda el concejal más cuestionado en esta legislatura: ha sido incapaz de resolver la situación de Limasa, no ha hecho absolutamente nada para frenar los vertidos de aguas residuales en nuestro litoral, tampoco para poner fin a las canteras ilegales de Churriana ni cumplir los acuerdos plenarios sobre energías renovables, por no hablar de las problemas con la facturación de EMASA, por lo que seguiremos tomando todas la medidas pertinentes para que esté a la altura de su puesto, algo que hasta la fecha no ha demostrado.
