Con el paso del tiempo, somos muchos los que tomamos
conciencia, de que el amor, no deja de tener algo de juego
agradable por una parte, y penoso por la otra.
Para saber como es, no existe otra alternativa, que la de
adentrarse en el.
Si decides mantenerte al margen o alejado, no tendrás la
oportunidad de conocer cuanto tiene de sublime, de dicha o
desdicha en su interior más recóndito.
Algo importante una vez encontrado, es saber medir con
cordura, cual será la distancia adecuada, para que perdure
y sea fructífero.
Si decides estar o permanecer demasiado cerca, no es
recomendable, pues todos sabemos que los edificios, para
que soporten la carga con garantía, los pilares de sustentación
han de guardar una separación o distancia, que se calcula
antes de ser levantado.
¡Si están demasiado alejados puede ser contraproducente!!.