El pasado día 23 de mayo, en el marco de las iniciativas parlamentarias que CCOO está promoviendo en el trámite de los PGE para 2017, el Senador del Grupo Socialista, David Delgado, pidió explicaciones al Ministro de Fomento por ante la reducción de un tercio en la financiación del Servicio Postal Universal (SPU) que presta el operador público Correos, advirtiendo de las negativas consecuencias que para la viabilidad de la empresa y el futuro de sus trabajadores y trabajadoras va a suponer esa medida.
En su respuesta el Ministro, ha insistido en que la consignación presupuestaria prevista para la financiación del SPU “tiene carácter provisional y se regularizará en cuanto se establezca el cálculo del coste del SPU” y que “el servicio postal público está completamente garantizado”.
Para CCOO las declaraciones, en sede parlamentaria, del Ministro De la Serna no despejan en absoluto las incertidumbres sobre el operador postal público. Al recorte financiero se añaden las pérdidas previstas en la cuenta de resultados de Correos para 2017 favoreciendo, de pasada, a lobbies privados muy interesados en que el operador público entre en fase de desmantelamiento progresivo y sin capacidad de construir un proyecto estratégico sólido a largo plazo.
El secretario provincial de Correos de CCOO Málaga, Salvador Sepúlveda ha manifestado que “responde a un criterio político y no objetivo. Carece de toda lógica que en los años de crisis se haya mantenido el presupuesto consignado a Correos para la Prestación del Servicio Postal Universal y que este año hayan aplicado este severo tijeretazo”.
CCOO afirma que “el recorte va a poner en jaque a la empresa pública, la vertebración territorial, social y económica del país, porque este tijeretazo es un hachazo al servicio público que se presta a los ciudadanos, a las empresas y a las administraciones públicas, con una clara reducción de la calidad, del servicio universal y de su regularidad”.
La organización sindical informa que “el 85% de la representación sindical de Correos, rechaza un recorte presupuestario que, para mayor abundamiento, se produce sin que, haber llevado a cabo una planificación tras la aprobación hace seis años de la Ley Postal. No se analizado ni desarrollado el Plan de Prestación que en aquella se contemplaba, ni definido los objetivos empresariales a corto, medio y largo plazo. A ello se suma el bloqueo del Convenio Colectivo bloqueado desde hace más de tres años, los salarios de la plantilla congelados durante seis años, y una gestión de recursos humanos con recortes permanentes, la flexibilización, la implantación de minijobs y la reducción de más de 15.000 empleos en los últimos años.”
Ante esta situación, CCOO insta al Ministro de Fomento y a la Presidenta de SEPI a que se retire en el trámite parlamentario, un recorte que puede poner en serios problemas la viabilidad del operador postal público, expulsando al desempleo a una parte importante de la plantilla, y poniendo en riesgo un servicio universal que garantiza la igualdad a su acceso de la ciudadanía. Si no se paraliza, el sindicato no descarta impulsar un proceso gradual de movilizaciones en Correos de modo conjunto con el resto de organizaciones sindicales.