Cada persona está en posesión de su propia belleza,
a pesar de que no todos sepan verla.
Alguien dijo, que donde hay educación, no se aprecia
distinción de clases sociales.
La ignorancia, es la noche cerrada de la mente; una
noche carente de estrellas.
Otra verdad es: si tienes la oportunidad de elegir un
trabajo que te guste y complazca, no tendrás que
trabajar un solo día.
Es mucho más importante, lo que pienses de ti, que
la opinión de los demás…
En ocasiones, dudamos de hacer ciertas cosas, pensando
que son difíciles, pero lo son, por no atrevernos a
hacerlas.