Casi 7.000 ciudades de más de 150 países, participarán hoy de «La Hora del Planeta», un evento que organiza el Fondo Mundial por la Naturaleza (WWF) y consiste en un gesto simbólico de apagar la la luz una hora, entre las 20.30 y las 21.30, para generar conciencia de la importancia de tomar acciones contra el cambio climático.
La Hora del Planeta se realizó por primera vez en 2007, en Sidney, Australia, cuando dos millones de personas decidieron apagar la luz durante una hora. Desde entonces, se volvió una de las mayores campañas de concientización sobre el cambio climático y el año pasado se realizó en más de 170 países.
La WWF en su página web destacó que 2016 «fue el año más cálido registrado desde 1880. Y desde que comenzó este siglo, cada año se batió el récord de temperatura del anterior. El cambio climático es ya evidente en todo el Planeta y especialmente en regiones como el Ártico».
«Hay razones para el optimismo -indica la WWF-, el 4 de noviembre de 2016 entró en vigencia el Acuerdo de París para frenar el cambio climático. Este acuerdo mundial marca un punto de inflexión y el comienzo de una gran transición global hacia un desarrollo y una economía limpia y baja en carbono».
En este sentido destacó como avances en la lucha contra el cambio climático que China haya paralizado la construcción de centrales de carbón y que algunas compañías aseguradoras, ciudades, bancos y fondos de inversión han dejado de invertir en combustibles fósiles.
«Queremos animar a toda la sociedad a sumarse a este gran movimiento, a hacerlo imparable y a evitar cualquier marcha atrás», destacó la entidad.
En España la movida incluirá a 150 empresas que ya anunciaron que apagarán sus luces esa hora. En el mundo se apagarán edificios emblemáticos como la Sagrada Família, el Palacio Real de Madrid, la Torre Eiffel, en París, el Empire State Building de Nueva York, el Taipei 101, en Taiwán, y la ópera de Sidney, Australia.
El secretario general de WWF España, Juan Carlos del Olmo, indicó que, con temperaturas en máximos históricos, tanto en verano como en invierno, «el planeta nos está lanzando un mensaje claro y tenemos que responder de forma urgente y contundente».
«El acuerdo de París es esperanzador y por ello este es el momento de actuar y pedir a todos que cambien por el clima», sostuvo.