Tú me miras confundida, en cambio yo, veo en tus
ojos, dos estrellas asomadas.
Pienso, que mis sueños, son como el agua entre sus
dedos, y que su cuerpo es,
un camino a recorrer, mientras la brisa se transforma,
en un lamento que agradece cada amanecer.
Tú, eres en la noche el sueño, y en el día mi hechizo.
Se que tu cuerpo es poesía, tu voz, puro sentimiento,
por eso, las palabras que brotan del corazón, llenas
de verdad, deben ser escuchadas.
¡Espero y deseo, que sigas siendo llama y sinagoga
del amor, y bálsamo para la nostalgia!!
Tú eres la energía que necesito, agua que apaga mi
sed, y dulce despertar…
¡En resumen, un buen motivo para mi existencia!!