El partido socialista empieza a prepararse para una contienda interna con, al menos, tres candidatos. Patxi López ha sido el primero en saltar a la arena, antes incluso de que el proceso de primarias haya sido convocado por Ferraz. Los siguientes serán Susana Díaz y Pedro Sánchez.
López inició este sábado su carrera por el territorio para presentar sus ideas. Su primera parada, Portugalete. La carrera del exlehendakari se produce en un momento en el que el PSOE ha encargado al economista José Carlos Díez (afín a Susana Díaz) la redacción del programa económico con la que el PSOE pretende salir de su congreso.
En esta lucha a tres, se da la paradójica circunstancia de que la candidatura de Pedro Sánchez podría convertirse en la mejor ayuda para la presidenta andaluza, dividiendo el voto en torno a sus otros oponentes.
En el entorno de Patxi López empieza a instalarse la idea que que fue un error lanzar la candidatura de manera tan apresurada. A día de hoy es el único candidato confirmado y tiene por delante cuatro meses difíciles de llenar con discursos hasta la celebración de las primarias.
La decisión del político vasco de presentar sus credenciales a la secretaría general tuvo un primer objetivo: frenar a Pedro Sánchez. El entorno del exlehendakari confiaba en que la candidatura de López quitase a Sánchez la idea de presentar batalla. No va a ser así.
El exsecretario general del PSOE cuenta con el apoyo de multitud de militantes descontentos con la deriva de la dirección controlada por Andalucía. «Pedro es más peligroso para Susana que Patxi», asegura uno de los principales barones afines a la presidenta andaluza.
Sánchez ha elegido Sevilla como próximo destino desde el que mantener vivas sus opciones. Su menguado equipo, apoyado en las plataformas enfrentadas a la gestora, quiere dar un golpe de autoridad en el territorio de la presidenta andaluza. Los fieles de Sánchez han elegido Sevilla tras saber que Patxi López tenía previsto un acto en esa misma ciudad. El próximo 28, Sánchez se volverá a subir a un escenario sin necesidad de aclarar que se presenta a la pelea para dirigir el PSOE.
Para Díaz, mejor una batalla a tres
Susana Díaz parte con la ventaja de tener frente a ella dos candidaturas que dividirán el voto en su contra. En su entorno preocupa más una batalla a dos que la que ahora se plantea con, al menos, tres participantes.
Mientras tanto la gestora continúa su labor de dirigir la política del partido y las principales decisiones que adoptarán sus grupos parlamentarios en debates tan importantes como el presupuestario.
A la espera de que los candidatos midan sus fuerzas, la gestora continúa con el trabajo de elaborar un discurso que saltó por los aires con las peleas internas que acabaron con la dimisión del anterior secretario general.