Durante dos días, José Luis Peñas ha explicado ante el tribunal cómo funcionaba la trama Gürtel. El exconcejal del PP, que es a la vez denunciante de la trama y acusado en el proceso, ha dibujado durante las dos sesiones el retrato de una época en la que la red corrupta estaba «integrada» en el PP.
Así, Peñas ha ido explicando cómo actuaban los integrantes de la trama Gürtel, qué hacían para lucrarse a través de fondos públicos. Pero también ha relatado el papel que tuvieron algunos políticos que ostentaban responsabilidades públicas durante aquella época, y que estuvieron rodeados por los principales acusados. Estos son algunos de los nombres propios de su declaración.
1. Francisco Correa. El gran protagonista de la declaración de Peñas. Tanto, que el cabecilla de la trama Gürtel ha llegado a desquiciarse y a insultar al exconcejal durante un receso, después de que este negase haber recibido pagos en efectivo por parte de las empresas de la trama. Su nombre se pronunciaba cada poco tiempo en la sala, ya fuera por parte de Peñas o de la fiscal.
El exconcejal contó cómo conoció a Correa. Se lo presentó el alcalde de Majadahonda, Guillermo Ortega, y dos días después empezó a trabajar con su mujer, Carmen Rodríguez Quijano. Según Peñas, apenas le vio en cuatro o cinco ocasiones a Correa hasta 2005, cuando su relación empezó a ser más intensa.
Peñas ha definido a Correa como “el jefe del aparato, el que lleva la nave”, hasta el punto de que hablaba como si fuese el alcalde o el concejal, y en algunas grabaciones habla de “adjudicar” uno u otro contrato público. Ante la sorpresa de la fiscal porque hable en primera persona, Peñas responde: “Hablaba como si fuese el alcalde, el concejal. Él entiende que es parte de la Administración”.
«No tenía conciencia de lo que realmente hacía, siempre pensaba que hacer negocios era hacer dinero de la forma que fuera, para él todo era un business«, ha contado el exconcejal del PP. Por eso, ha explicado durante el juicio, Correa no era consciente de si estaba cometiendo cohecho o malversación, como él mismo dijo durante su declaración.
Para ilustrar el carácter de quien comandaba la trama corrupta, Peñas mencionó durante el juicio que su número dos, Pablo Crespo, del que apenas ha hablado, le “gritaba a todo el mundo”, salvo a Correa. Durante el juicio, Crespo, que no ha dejado de tomar notas, ha calmado en alguna ocasión a su exjefe, que no paraba de hacer gestos durante la declaración del exconcejal.
2. José María Aznar. Peñas ha explicado que Correa se beneficiaba de las excelentes relaciones que mantenía con los altos cargos del PP. Y fue en este punto cuando mencionó al expresidente del Gobierno, José María Aznar. «Correa era amigo del presidente del Gobierno en aquella época», dijo el exconcejal.
Correa organizaba todos los actos para el PP, incluidos los que contaban con la presencia del presidente del Gobierno. Todo el mundo en el partido sabía quién era Correa, era “archiconocido” y además estaba siempre junto a Aznar. Durante los actos hablaban constantemente.
Esa amistad que relata Peñas fue la que permitió a Correa introducirse en los municipios gobernados por el PP, con el aval de su cercanía al presidente del partido y del Gobierno. Se empezaba haciendo negocio con la organización de eventos, y se daba el pelotazo con las operaciones urbanísticas.
Aznar no va a declarar en el juicio de Gürtel, pero sí lo van a hacer las personas que estuvieron en su círculo político más cercano. Los exsecretarios generales del PP Francisco Álvarez Cascos, Javier Arenas y Ángel Acebes, y los vicesecretarios generales Jaime Mayor Oreja y Rodrigo Rato pasarán por el juicio en calidad de testigos.
3. Luis Bárcenas. El nombre del extesorero del PP se ha pronunciado en algunas ocasiones, pero Peñas ha dejado muy claro que no tenía una relación directa con él, y que se cruzaron algunas veces, pero poco más. Lo ha situado dentro del grupo de miembros del PP que daban trabajo a las empresas de Correa.
Durante el tiempo que grabó a Correa, la mención más importante que hizo sobre Bárcenas fue al final, cuando Peñas ya había denunciado los hechos. Acudió a una reunión más con el cabecilla de Gürtel, con miedo a que este, por sus contactos, supiese ya que había acudido a la justicia. Pero Correa no tenía ni idea y pronunció la célebre frase de los mil millones.
Más allá de eso, durante el tiempo en el que la relación de Peñas con Correa fue más estrecha, el nombre de Bárcenas salió a relucir «un par de veces, más como parte de un grupo que les estaba permitiendo trabajar para el partido».
En su declaración, el exconcejal ha dicho que nunca escuchó que se refiriesen a él como ‘Luis el Cabrón’ –la anotación que consta en la contabilidad B de Correa– pero que tampoco es Luis Delso, como han dicho algunos acusados, porque con él tenían cierto grado de amistad. «Les escuché referirse a los cabrones de Génova, al cabrón de Luis, que no les daba trabajo», ha añadido.
Eso sí, sin nombrarle, le ha situado en el centro de la trama. Cuando ha contado cómo el PP pasaba una lista de empresas a las que beneficiar porque habían financiado la campaña, dijo que el fax provenía «de la tesorería» del PP nacional –el departamento que dirigía Bárcenas– o «de gerencia».
4. Guillermo Ortega. Exalcalde de Majadahonda y la persona que fichó a Peñas para el Ayuntamiento. Se conocieron durante un máster, y se lo llevó primero de asesor y luego de concejal. El día que le nombró para ese puesto en 2003 fue cuando le reveló que el PP quería agradecer a ciertas empresas su colaboración en campaña.
Peñas dice que se quedó en ‘shock’ y que por eso no es capaz de recordar de qué empresas se trataba. Quiso dejar su puesto y estuvo dos semanas sin aparecer por el Ayuntamiento, pero Ortega le convenció de que siguiese. No le pediría que hiciese nada ilegal, esa era la promesa, y Peñas aceptó.
Así, durante los años de gobierno de Ortega, el Ayuntamiento otorgó contratos a dedo y entregó una parte de lo que sacaba al partido, según ha explicado el exconcejal. Pero cada vez se quedaba con un porcentaje mayor de lo que se sacaba de los amaños, y eso no gustó a Génova.
«Si no llevas dinero a Génova, no te van a mantener como alcalde, van a poner a alguien que les lleve el dinero para poder seguir haciendo sus campañas por encima de los presupuestos legales», ha añadido en su declaración.
Por eso decidieron «cortarle la cabeza», ha dicho Peñas, y no por el escándalo de la venta de unas parcelas de Majadahonda. Disiente en el motivo, pero no en quién tomó la decisión. Según el exconcejal, fue Esperanza Aguirre quien decidió apartar a Ortega de la alcaldía.
5. Esperanza Aguirre. La conexión de Gürtel primero con el Ayuntamiento de Madrid, y luego con la Comunidad, es Alberto López Viejo. «He coincidido con él en algún acto institucional de la Comunidad de Madrid, le recuerdo siempre organizando, siempre estaba preocupado por la presidenta, por el atril, por las luces», explicó Peñas.
La presidenta era Esperanza Aguirre, que fue quien le fichó como consejero. López Viejo decidió canalizar a través de las empresas de Gürtel la enorme actividad pública de la presidenta regional, que tenía «mínimo tres actos al día y tres intervenciones en televisión».
En esos actos que organizaba para ella la trama Gürtel, Aguirre estaba muy pendiente de todos los detalles. «La expresidenta era una persona muy atenta a todo, escrupulosa, cada acto tenía que ser mejor que el anterior», ha explicado Peñas, que ha añadido que Aguirre no participaba en ningún acto si López Viejo no lo había organizado.
Gürtel organizaba actos para la Comunidad de Madrid y para el PP en campaña. Cuando el partido se quedaba sin dinero para estos eventos, a veces acababan pagándolo las consejerías con dinero público. «El PP decía ‘no tengo dinero, a ver cómo lo hago’, y esos actos se facturaban a las consejerías de la Comunidad de Madrid», ha relatado Peñas. La Fiscalía cree que López Viejo era el responsable de ese sistema de trasvase de fondos.
El Gobierno de Aguirre ha vuelto a quedar manchado, una sesión más, por el troceo de facturas. Peñas ha insistido en lo que han dicho otros acusados: la orden de trocear las facturas de los actos provenía del cliente, del Gobierno de Aguirre.
6. Jesús Sepúlveda. El exalcalde de Pozuelo de Alarcón y exmarido de Ana Mato era un gran amigo de Correa. Así lo ha contado Peñas ante el tribunal, cuando ha relatado que ambos estaban siempre juntos en los mítines que organizaba Gürtel, y cuando acababa se iban juntos «a cenar o a tomar unas cervezas».
«Sepúlveda era el responsable de los actos del PP nacional, él siempre solía estar con el señor Correa (…) Se les veía continuamente juntos», explicó. Eran los que controlaban todo lo que ocurría en el mitin: el representante de las empresas y el representante del partido político. Correa trataba todo con Sepúlveda y «con el presidente», ha dicho en referencia a Aznar.
«Me das unas obritas y te compro el Land Rover». Fue lo que dijo Correa a Sepúlveda, según Peñas, en la frase que resume su buena relación. El exconcejal ha dicho que Correa terminó comprándole el coche con el compromiso de que el exalcalde le adjudicaría esas obras, pero no cumplió su palabra.